Ella la hizo con cerezas, pero como yo tenía en casa un bote de mermelada de frambuesa y unas fresas, la adapté a nuestra manera

Es una tarta muy fácil de hacer, os animo a que la probéis

• 100 g mantequilla
• 200 g de galletas (un paquete)

Para el relleno de la tarta:

• 2 huevos
• 100 ml de leche
• 150 gr de leche condensada
• 250 gr de queso mascarpone (1 terrina)

Para decorar:

• fresas
• 1 bote de mermelada de frambuesa
• 4 láminas deshidratadas
  

ELABORACIÓN

Precalentar el horno a 200ºC.

Base: Poner la mantequilla en el vaso 3 min, 60ºC, vel 2 para que se funda. Agregar las galletas en trozos. Mezclar bien 20 seg, vel 5, bajar los restos de las paredes y repetir la operación. Colocar esta masa como base en el molde que vayamos a utilizar y meter al horno mientras elaboramos el relleno.

Relleno: poner todos los ingredientes en el vaso y mezclar bien 30 seg en vel 6. Echar esta mezcla en el molde y hornear 30 min a 200ºC. Colocar la bandeja en el carril uno por debajo del medio para que no se dore mucho por arriba pero que cuaje. Yo después lo puse 10 minutos más sólo por debajo porque no había cuajado suficiente.

Decoración: mientras la tarta esta en el horno, iremos cortando las fresas en rodajas. Ponemos las láminas a hidratar durante 5 minutos. Una vez horneada, colocar las fresas en la superficie mientras la tarta aún está caliente. Poner la mermelada en el vaso y calentarla 2 min, 60ºC, vel 2. Añadir 1 minuto más e ir introduciendo las láminas hidratadas. Con un pincel pintar toda la superficie de la tarta con la mermelada y meter al frigo un mínimo de 6 horas, mejor toda la noche para que se enfríe bien.